jueves, 3 de agosto de 2017

Ritmo individual


Fotógrafo: Robert Parkeharrison

El significado de las cosas cambia de cultura en cultura y de persona en persona, por ello, para poder decifrarnos a nosotros mismos no hay que dejarse llevar estrictamente por las generalidades y resultados en masa. Los testimonios y experiencias de los demás pueden ser una aproximación o a lo más una pista, pero no una verdad absoluta de nuestro ser. Aprende a discernir, ya que la realidad de otro no es necesariamente aplicable a la tuya. Puedes adaptar el conocimiento que adquieres por medio de la interacción con la gente, teniendo en cuenta que no eres esa gente.

Recordemos que estamos en una sociedad que te invita a la invasión del individuo, creyendo que para poder entablar cualquier tipo de relación no deben existir límites, opinando sobre las vivencias del otro como jueces y verdugos, cuales amos de la vida y la realidad ajena; pero a la hora de la verdad, los límites son esenciales para la salud de cualquiera, y todos queremos nuestro espacio limpio y libre de ojos acusadores y lenguas punzantes. Más que mal, a estas alturas todos somos anormales y comunes al mismo tiempo; debemos respetar la diversidad de visiones y maneras en que el resto se desenvuelve sin ensuciar su metro cuadrado.

Toda persona es un mundo, único en sí mismo; con sus eclipses, con sus desastres naturales y nuevos amaneceres. Es importante conocer nuestra galaxia interna y sacarle provecho a cada estrella.  
Cada quien tiene su propio camino hacia la autosanación, no es justo quedarse con culpas y rencores pasados, nos hayan dicho lo que nos hayan dicho o nos hayan hecho creer lo que nos hayan hecho creer. ¡Nos debemos nuestra libertad!. Nos debemos el derecho a desprendernos de los conceptos e ideas añejas e inútiles.

Cabe destacar, que hoy en día, se hace necesario realizar un trabajo de introspección profunda, para dejar de permitir que terceros decidan quiénes y cómo somos. ¡No cedas ante presiones socio-familiares ni a restricciones personales!, disfruta de tus prisas, de tus pausas y de tus vuelos. Por último, es menester reconciliarse con cada una de nuestras partes, así sean oscuras siempre nos enseñan algo de la luz...

12 comentarios:

Navegante dijo...

No puedo menos que coincidir. Teniendo cada uno de nosotros toda esa galaxia interna, reprimirla y no ser es un autodaño que no perdonan las estrellas.
Saludos.

lunaroja dijo...

Así es! esta es la única manera de crecer,de individualizarnos, de respetar nuestras diferencias,para que nos unan! aunque parezca un contrasentido!
Te dejo aquí un extracto de un ensayo de Viktor Frankl que me llegó por correo,y que creo que viene totalmente a favor de lo que dices!
Un abrazo inmenso!

lunaroja dijo...

NO pude copiarte el enlace del ensayo que te comenté,porque es demasiado extenso, te lo envío por correo!
besazo!

lanochedemedianoche dijo...

Tal cual, la vida en cada persona marca su ritmo, no se puede guardar palabras que un día nos afectaron, el rencor crece junto a la violencia interna, y nos va matando lentamente, la libertad es nuestra aliada, busquemos esa parte dentro de nuestro ser liberando nuestro propio mundo, eres muy buena escribiendo sobre temas tan importantes.
Te abrazo

Cinthia dijo...

Estamos hechos de experiencias. Personales, no contadas. Cada vivencia nos va formando a ser quienes somos.
Qué linda tu prosa.
Me alegro de haber llegado a tu blog.

**kadannek** dijo...

Por correo BlueSilence envía el siguiente comentario:

Tuve dificultades para comentar en tu última entrada así que dejo por aquí mi aporte:

Siempre hay alguien que llega a imponerte una de esas "recetas mágicas", si no la sigues eres un elemento extraño de la comunidad (país, sitio de trabajo, familia). Lo que me llama mucho la atención es cómo depositan tanta devoción a dichas "recetas". ¿Cómo pueden dar por sentado que harán el milagro? La próxima vez que me encuentre a alguien así le preguntaré si es completamente feliz con su vida, cuando se de cuenta de que no lo es le preguntaré por qué insiste tanto en que yo siga sus pasos si no está feliz con su vida. Lo lógico sería seguir las recomendaciones de aquellos que son felices y no de aquellos que son infelices, lo interesante del asunto es que aquellos que llevan una vida plena no imponen nada a nadie, si me permiten generalizar un poco.

Sophie dijo...

Coincido contigo pero a veces no es fácil

C&C dijo...

Me da curiosidad por saber si realmente pones en práctica lo que tanto pregonas; porque tengo mis dudas.

AMALIA dijo...

Muy interesante leerte. Lo expresas muy bien pues realmente escribes excelente.

Muchas gracias.

Un beso. Felices días.

Mª Jesús Muñoz dijo...

Kadannek, gracias por tu cercanía y comentarios, amiga...
Ese ritmo individual, que nos permite profundizar en nosotros mismos es sumamente necesario para valorar la vida y nuestra propia persona...En estos momentos de lucha con mi artritis soy consciente de cada sentido que nos permite ser y sentir, doy gracias por ello...La vida nos deja cada día múltiples regalos. Es importante la actitud positiva para superar nuestros límites y descubrir la belleza de las cosas, que nos rodean...Las tristezas, el rencor y el miedo son pruebas que debemos superar para liberar el espíritu, que nos muestra la infinitud del universo...Es importante mantener el ánimo, la fortaleza y la fé...Es un placer leerte y reflexionar contigo sobre los temas importantes de la vida, Kadannek.
Te dejo mi abrazo y mi cariño siempre.

Beauséant dijo...

Entiendo lo que dices y, como de costumbre, estoy de acuerdo, aunque esta vez debo añadir un pero, más bien una pregunta, ¿dónde se pone el límite?

Quiero decir que, si aplicamos esta teoría entonces todo es respetable, ¿no? Es decir, cualquiera puede ser un artista, un escritor o un fotógrafo aunque sus obras sean una porquería y si dices eso, que son una porquería entonces, ¿es una falta de respeto?, ¿le estamos oprimiendo?.. Eso por no hablar de determinadas ideas que, directamente son nocivas.

Lo digo porque hace tiempo que vengo observando una especie de corriente de pensamiento que dice que todos somos especiales y por tanto debemos respetar cualquier cosa que digan o digamos.

Creo que me he salido un poco del tema, perdona... Entiendo que tu texto se cernía al terreno más personal, más íntimo... ¿no?

Como ves, siempre me das que pensar..

**kadannek** dijo...

-Navegante: Así es, la clave es desprenderse de los conceptos que no autolimitan, borrar esas ideas equivocadas que nos hicieron creer de nosotros. Saludos.

-Lunaroja: Me encanta esa expresión, permitir que nuestras diferencias nos unan. Es parte del encanto de la diversidad, mostrarnos un sinfin de realidad y alternativas. No pude leer el ensayo ni me llegó. Ojalá me lo puedas facilitar aunque sea por partes, aunque intentaré buscarlo por mi cuenta. Gracias.

-María del Rosario Alessandrini: Destacaste un punto relevante; el rencor nos intoxica, nos nubla el juicio y nos hace ver las cosas de manera alterada y hasta desmedida. El que quiera vivir con ese veneno es su elección, pero debe saber de antemano que esa violencia interna, como dices, crece y nos daña. Muchas gracias por venir. Un abrazo.

-Cinthia: Bienvenida! Concuerdo con tus palabras y justamente eso es en parte lo que intento expresar en esta entrada, tener en cuenta que somos seres individuales inmersos en una comunidad, pero que cada experiencia es única y ello es lo que nos forma. Saludos.

-BlueSilence: Destacable tu visión. Hay personas que imponen sus "estrategias de vida" o "recetas", como dices, que si bien, independiente de si a ellos les funcionaron o no, eso no significa que al otro le resulte. Justamente a ello me refiero con lo de que la realidad de los demás no es necesariamente aplicable a la nuestra. Se pueden aceptar y seguir sugerencias, pero hay que adaptar los consejos en base a la propia experiencia y necesidades. Un abrazo!

-Sophie: Estoy de acuerdo, no es fácil, no siempre se logra, pero con intentarlo vale. Saludos!.

-La vie en rose: No te preocupes, aunque prejuicioso es habitual que algunas personas pongan en duda a quien desconocen. La idea es aplicar lo que la experiencia y reflexión te otorgan. Gracias por tu interés. Saludos.

-Amalia: Muchas gracias por leer y tomarte el tiempo de comentar. Me alegra que te agraden estas letras. Felices días también para ti.

-M. Jesús Muñoz: Concuerdo, conociendo el ritmo personal con el que nos movemos, podemos latir más acompasadamente con el sentido de gratitud, valorando más la vida y lo que nos rodea. Sé que tu lucha es difícil, pero quienes te conocemos sabemos la fortaleza que te impulsa. Es cierto que una actitud positiva es un aliado indiscutible para enfrentar las cosas, superar trabas y mantener el balance. Como te sugerí hace tiempo, cremas en base a alcanfor, eucalipto y menta, son excelentes para la artristis. Mucho éxito.

-Beauséant: Con los límites personales, en este contexto, me refiero a las trabas individuales inculcadas por conceptos socio-familiares, que nos crean restricciones y traumas. Creando, incluso, autoengaños, de los cuales deberíamos librarnos. No soy partidaria de vomitar tu neurosis en el otro, por ejemplo, sólo porque te crees merecedor de un desahogo. Hago hincapié en que todos necesitamos nuestro espacio y que éste sea respetado, justamente de esos elementos nocivos que mencionas. Hace varios meses atrás escribí una entrada sobre "La importancia del límite", la cual, pienso, aplica más a la línea por donde llevas tu comentario, pero creo que ya lo leíste. La cosa es entendamos que mi realidad no es como la tuya, que tengo una forma de ver y actuar frente a la vida, la cosa no es ser cerrado de mente, pero tampoco tragarte todo porque sí. Un abrazo. Gracias por tus reflexiones.