Existen ocasiones en que uno aprende "a la mala" lecciones de vida muy sabias de las personas más curiosas que uno se pueda imaginar y de la manera más insospechada. El asunto está en que sea quien sea el que nos esté dando ese valioso conocimiento, debemos quitarnos la venda de los ojos, apartando el orgullo, la soberbia e inclusive la ira por un momento para poder captar dicho mensaje, pues de lo contrario, éste quedará oculto en nuestro subconsciente, y lo único que recordaremos será el trago amargo del momento.
Ya lo dijo khalil Gibrán hace mucho: "Del hablador he aprendido a callar; del intolerante a ser indulgente, y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud hacia esos maestros"
Ya lo dijo khalil Gibrán hace mucho: "Del hablador he aprendido a callar; del intolerante a ser indulgente, y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud hacia esos maestros"
Y seamos honestos, no se trata de agradecerle de forma verbal y directa a la persona por hacernos sentir mal, ya que infligir daño pudiendo evitarlo es incorrecto, mas bien, con todo esto quiero decir que hay que tener altura de mira, bajarle un poco el perfil a las cosas y reflexionar sobre los eventos aparentemente negativos en nuestra vida, pues como suele decirse "no hay mal que por bien no venga". Las cosas no pasan porque sí y ya, eso es una visión algo vacía y desentendida a mi parecer. Soy de esas personas que sigue pensando que todo ocurre por algo, pues no creo en la casualidad pero sí en la causalidad; Antiquísima Ley universal de causa y efecto que siempre ha existido y existirá. Se trata de lógica y sentido común.
Aunque no me creas, si lo piensas con mucho más detenimiento, todos hemos aprendido algo, por más insignificante que sea, de alguna persona que nos ha hecho mal o nos desagrada. Podríamos llamarles "torpes maestros inconscientes", una especie de mensajeros dormidos que ignoran el hecho de que gracias a su comportamiento sub-humano nos haremos más fuertes para afrontar la vida y momentos más duros con mejores herramientas.
Sé que es una visión optimista y que parece poco aplicable, pero es bastante práctica, ya que evitaremos tomarnos las cosas de forma demasiado personal, evitando rencores exagerados de paso.
Entonces, estimadísimo lector, si pasaste o estás pasando por un mal momento gracias a la inesperada intervención de un tercero, primero intenta calmarte, respira y piensa que la vida puede estarte queriendo enseñar algo con esto. Así no lo veas enseguida, sólo intenta ocuparte del problema en vez de preocuparte. No existe otro método para resolverlo.
No te enfoques en el mensajero si no en el mensaje.
No te enfoques en el mensajero si no en el mensaje.